La naturalidad del color”, así se podría definir de manera sencilla la obra de Alessandro
Savelli.
Una utilización sabia, hábil y emocionante de la pintura, signos y colores creados por el
artista utilizando un complejo paisaje simbólico de la humanidad, como si fuera una clase
de estado mental…
Un cuento cromático inspirado por historias lejanas y cercanas, lleno de recuerdos y de
lugares arcanos inolvidables…
La imagen de Savelli es un conocimiento racional, logrado por interesantes contrastes
enrollándose gracias al dominio de sus dinámicas, hasta extralimitarse hacia
desequilibrios capaces de asombrar el espectador.
El camino de Savelli está repleto de actos y color; con el tiempo el artista encuentra su
síntesis y su concepto, en un equilibrio de composición y simbología. Unas telas expresan
tensión y dinamismo, otras equilibrio. Su camino es un estudio, una investigación sobre
la herramienta pictórica, basada en el conocimiento de su importancia cuando se utiliza
sobre la tela; esta manera es estrictamente funcional a la trascripción de las emociones
del artista. De esta forma, el arte de Savelli llega a expresarse en su lenguaje-madre,
privándose al fin de su significado reflejante al mundo externo, que sólo aparece en
mínima parte en los títulos.
La pincelada es espesa y viva, claro ejemplo de la trasposición de un lenguaje puro. En
estas obras dinámicas, las líneas y las pinceladas son los verdaderos líderes de la escena,
hasta el punto de dejar translucir la superficie monocromática de la tela, casi fuera un
mensaje escrito en la superficie de una hoja hipotética con los elementos puros de la
pintura.
El arte de Savelli es una clara síntesis de técnicas, aprendidas con sabiduría y
reelaboradas en una forma firme al punto de conseguir jugar con el significado de la
luminosidad, creada únicamente por la planificación del color, cuyo significado es no más
abstracto, sino expresivo.
Anna Dusi
Curator
ADC Building Bridges